En Lisboa, la capital portuguesa, las calles empedradas están repletas de tiendas que venden bacalhau nadando en aceite de oliva y natillas de huevo del tamaño de un bocado espolvoreadas suavemente con azúcar en polvo.
Estos son los platillos y postres más queridos y famosos que debes comer en cualquier viaje a Portugal.
Bacalhau
En casi todos los restaurantes portugueses, los viajeros pueden encontrar bacalhau (bacalao seco y salado).
El platillo tradicional viene con su propio apodo, “el amigo fiel”, y los portugueses se apresuran a recordarte que hay más formas de preparar bacalhau que días del año. ¡Así de famoso es esta comida portuguesa!
Lo puedes encontrar como bacalhau à brás: papa frita, bacalao, cebolla y huevos revueltos; o puedes solicitar bacalhau com todos, un platillo de bacalao hervido y verduras y huevos duros en rodajas.
Sopa da pedra
Sopa da pedra – ‘sopa de piedra’ – viene muy caliente con su propia leyenda. Según el folclore portugués, un monje sin hogar no tenía qué comer, así que en lugar de pasar hambre, limpió una piedra y la hirvió en agua.
Cuando los aldeanos pasaron junto a él, todos sintieron lástima por él y agregaron algo para alegrar su comida: algunas papas, algunos trozos de carne, una bolsa de frijoles.
La sopa se transformó lentamente de un estofado de pobre a un verdadero festín. Una vez que terminó de cocinarse, el monje retiró la piedra e invitó a los aldeanos a unirse a él para comer.
La historia todavía se cuenta hoy y tiene una moraleja distinta: la importancia de compartir, y la sopa, como en la historia, se puede preparar con una gran variedad de ingredientes y compartir entre amigos.
La sopa da pedra es un verdadero exponente de la comida portuguesa.
Alheira de Mirandela
La alheira es una especie de salchicha mezclada con pan y carne, típicamente hecha sin carne de cerdo, lo que hace varios siglos era poco común.
Esto se debió a que cuando los judíos fueron expulsados de Portugal en el siglo XV, los que optaron por quedarse tuvieron que convertirse al cristianismo.
Pero muchos se convirtieron sin cambiar realmente sus creencias y sus dietas siguieron siendo las mismas, lo que significaba evitar la carne de cerdo.
Para convencer a otras personas de que se habían convertido, la gente colgaba salchichas que no parecían kosher en sus casas, salchichas que se hacían pasar por productos de cerdo, pero que en realidad estaban hechas de una mezcla de vaca, caza y pan.
Hoy en día, las alheiras se asan a la parrilla y se acompañan con un montículo de papas fritas y un huevo frito. Así ha evolucionado esta comida portuguesa.
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Caldeirada de enguias
La ciudad costera de Aveiro es famosa por la pesca de anguilas. Se sabe que los chefs aquí preparan caldeirada de enguias, un guiso de anguila adornado con azafrán y tiras de pimiento, cebolla y papas.
La mayoría de las veces se acompaña con una copa de vino blanco crujiente para resaltar los sabores de la anguila y las verduras.
¿Estás listo para comer esta comida portuguesa tan adictiva y deliciosa?
